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HIPERTENSION Y VENTRICULO IZQUIERDO
ESTRUCTURA Y FUNCION DEL VENTRICULO IZQUIERDO EN JOVENES
ESTUDIANTES VARONES DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE LA PLATA CON
HIPERTENSION ARTERIAL EN ESTADIO I
EDUARDO M. ESCUDERO, SUSANA
DE LENA, HORACIO E. CINGOLANI*
Centro de Investigaciones
Cardiovasculares, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional
de La Plata
* Miembro de la Carrera del Investigador del CONICET (Consejo
Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas)
Key words: hipertrofia ventricular, ecocardiografía,
hipertensión arterial
Resumen
De un
grupo homogéneo de 219 varones estudiantes de Medicina (20,9 ± 1,6
años) a quienes se les examinaron los valores de presión arterial
(PA), a 34 se les realizó un estudio ecocardiográfico para analizar
la estructura y función del ventrículo izquierdo (VI). En base a los
niveles de PA propuestos por la JNC-V se separaron dos grupos: PA
optima (PAO)(21 varones -20,23 ± 0,18 años) e hipertensos estadío I
(H)(13 varones -20,85 ± 0,66 años). Los H mostraron un índice de
masa corporal (IMC) mayor (PAO: 22,5 ± 0,38 kg/m2 — H: 24,26 ±
0,84 kg/m2 -p < 0,04) y una frecuencia cardíaca (FC) superior
(PAO: 69,6 ± 1,53 lat/min— H: 80,5 ± 3,58 lat/min -p < 0,003).
La estruc-tura ventricular izquierda mostró diferencias en el espesor
de las paredes del ventrículo y en el índice de masa ventricular
izquierda (IMVI). Los H tuvieron mayor IMVI (PAO: 89,6 ± 3,33 g/m2
— H: 124,5 ± 6 g/m2 -p < 0,01) y espesores de las paredes
aumentados (Pared posterior PAO: 7,9 ± 0,18 mm, H: 10 ± 0,13 mm -p
< 0,01; Septum interventricular PAO: 8,7 ± 0,17 mm, H: 11,5 ± 0,4
mm -p < 0,01), aunque sin superar los límites normales máximos
para considerar hipertrofia. Los jóvenes con H mostraron un aumento
del índice cardíaco (IC) (PAO: 3,3 ± 0,14 l/min/m2— H: 4,8 ±
0,36 l/min/m2 -p < 0,01) con disminución de la resistencia
periférica total (RPT) (PA0 17 ± 0,8 mmHg/l.min.m2, H: 13 ± 1
mmHg/l.min.m2 -p < 0,008). No se encontraron diferencias
estadísticamente significativas entre los grupos en los índices de
valoración de la función sistólica del VI. La función diastólica
fue diferente en los H mostrando un desplazamiento del lleno
ventricular hacia la fase más tardía. El área de la onda de lleno
tardío (A) resultó menor en PAO (PAO: 2,64 ± 0,09 cm2, H: 3,78 ±
0,95 cm2 -p < 0,01) a pesar de la distinta FC entre los grupos
(medias ajustadas PAO: 2,9 ± 0,09 cm2, H: 3,52 ± 0,95 cm2 -p <
0,01). La fracción de lleno temprano (FLLT) mostró también un
cambio significativo del mismo hacia la parte más tardía en H (PAO:
0,72 ± 0,06%, H: 0,64 ± 0,01% -p < 0,01) que fue independiente de
valores de FC (medias ajustadas PAO: 0,71 ± 0,06%, H: 0,65 ± 0,01%
-p < 0,01). Los resultados analizados nos permiten concluir que en
este grupo de varones jóvenes con hipertensión arterial estadío I
del JNC V ya se observa un aumento del IMVI con mayor IC y
disminución de las RPT y una alteración del lleno ventricular con
desplazamiento del mismo hacia una fase más tardía.
Abstract
Left
ventricular structure and function in young male medical students of
La Plata University with stage I hypertension. From an homogeneous
population of 219 male medical students of La Plata University (20.9
± 1.6 years) who underwent a blood pressure screening, 34 were
selected for measurements of left ventricular structure and function.
Considering the JNC-V classification, samples from two groups were
selected for comparisons: Optimal blood pressure (OBP)(21 males, 20.33
± 1.8 years) and Hypertensives stage I (H) (13 males, 20.85 ± .66
years). The H showed values of body mass index (BMI) and heart rate
(HR) higher than OBP (bMI OBP: 22.5 ± 0.38 kg/m2, H: 24.26 ± 0.84
kg/m2 -p < 0.04; HR OBP: 69.9 ± 1.53 lat/min-H 80.5 ± 3.58
lat/min -p < 0.03). Although the H were not reaching values of left
ventricular mass index (LVMI) or septal (S) and posterior wall
thickness to be considered hypertrophics, they were exceeding the OBP
group (LVMI OBP: 89.6 ± 3.33 g/m2, H: 124.5 ± 6 g/m2 -p < 0.01; S
OBP: 8.7 ± 0.17 mm, H: 11.5 ± 0.04 mm; P OBP: 7.9 ± 0.18 mm, H: 10
± 0.13 mm -p < 0.01). Cardiac index (Cl) was increased in H (OBP:
3.3 ± 0.14 l/min/m2, H:4.8 ± 0.36 l/min/m2 -p < 0.01) supporting
the existence of a hyperkinetic circulatory phase. OBP showed total
peripheral resistance (TPR) higher than H group (OBP: 17 ± 0.8
mmHg/l.min.m2, H: 13 ± 1 mmHg/l.min.m2 -p < 0.008). Left
ventricular (LV) systolic function indexes were not different in the
two groups analyzed. The pattern of left ventricular late filling was
however different between the two groups. The area of late diastolic
flow (Area A) was lower in OBP (OBP: 2.64 ± 0.09 cm2, H: 3.78 ± 0.95
cm2 -p < 0.01) independently of HR value (adjusted mean OBP: 2,9 ±
0,09 cm2, H: 3,52 ± 0,95 cm2 -p < 0,01). The early filling
fraction (EFF) was also detecting a significant shift to more
prominent late diastolic filling in H (OBP 0.72 ± 0.06%, H: 0.64 ±
0,01% - p < 0,01) independently of HR values (adjusted mean PAO:
0.71 ± 0.96%, H: 0.65 ± 0.01 % -p < 0.01).
Healthy young males with hypertension stage I have similar LV systolic
function, increased Cl, LVMI, LV wall thickness, decreased TPR and
evidence of impaired LV filling with shift of the pattern of filling
to a late flow.
Dirección postal: Dr. Eduardo M. Escudero, Centro de
Investigaciones Cardiovasculares, Facultad de Ciencias Médicas, Calle
60 y 120, 1900 La Plata, Argentina
Recibido: 26-I-1996 Aceptado: 15-X-1996
Es bien conocida la significación que tienen los cambios
estructurales y funcionales del ventrículo izquierdo secundarios a la
hipertensión arterial sobre el pronóstico evolutivo de la misma1-5.
Alguna de esas alteraciones aparecen en los estadios iniciales de la
enfermedad, señalando la precocidad en la instalación de esos
cambios6, 7.
Si bien los diferentes estudios realizados en las últimas décadas
han permitido un mejor conocimiento de la fisiopatología de la
hipertensión arterial8 poco se conoce acerca de los procesos
tempranos que llevan a la patología del órgano blanco.
El presente trabajo fue diseñado en el marco del convenio entre la
Universidad Nacional de La Plata y el Ministerio de Salud y Acción
Social de la Pcia. de Buenos Aires a los efectos de analizar el
compromiso temprano en la estructura y función del ventrículo
izquierdo, en un grupo de pacientes jóvenes varones con hipertensión
arterial estadío I.
Material y métodos
En los 500 estudiantes que cursaban el tercer año de medicina en
la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La
Plata, las presiones arteriales sistólicas (PAS) y diastólicas (PAD)
fueron medidas por estudiantes de la misma carrera entrenados para esa
tarea. Las determinaciones se realizaron utilizando un
esfigmomanómetro de mercurio de acuerdo a las recomendaciones del
Joint National Committee-V (JNC-V)9. Los valores de presión arterial
(PA) fueron registrados luego de 5 minutos de descanso con los sujetos
sentados, el brazo descubierto y apoyado a nivel del corazón, sin
haber fumado ni tomado café en los 30 minutos previos a la
determinación. Se realizaron tres tomas de PA, repitiendo la
medición a la semana con otras tres determinaciones a la semana. La
frecuencia cardíaca (FC) fue obtenida con el registro
electrocardiográfico durante la realización del ecocardiograma. El
peso en kilogramos y la talla en metros se determinaron en la 1ra
entrevista. El índice de masa corporal (IMC) fue calculado como peso
en Kg dividido por la talla en metros elevada al cuadrado. Se
excluyeron del total 50 sujetos por cuestionarios incompletos u otras
razones siendo realizado finalmente el análisis con los 219 varones
que quedaron del grupo total.
Según los promedios de los valores de PA de las dos entrevistas se
separaron dos grupos de acuerdo a las especificaciones del JNC-V9.
1. Grupo A Presión arterial óptima (PAO): los promedios de las 6
determinaciones fueron £ a 120/80 mm Hg. De los 89 individuos (41%)
que pertenecían a este grupo, 21 aceptaron ser seleccionados para
realizar el estudio ecocardiográfico.
2. Grupo B Hipertensos Estadío I (H): promedio de PA ³ 140, £ 159
mm Hg de presión sistólica y 90 a 99 mm Hg de presión diastólica,
confirmado en una segunda ocasión. De los 28 individuos (13%) de este
grupo, 13 aceptaron ser seleccionados para realizarles estudio
ecocardiográfico.
En todos los casos se realizó ecocardiograma bi-dimensional con
efecto Doppler utilizando un Aloka SSD 2000 (Aloka Co. Ltd. Tokio,
Japón) con transductor phased-array de 2,5 MHz. Las mediciones
llevadas a cabo en los trazados de eco-bidimensional y modo M guiado
por el bi-dimensional fueron realizadas según las recomendaciones de
la American Society of Echocardio-graphy10. Se estudiaron las
características espectrales de los flujos mitral y del tracto de
salida del ventrículo izquierdo utilizando Doppler pulsado según
metodología establecida11. Los trazados ecocardiográ-ficos fueron
codificados e interpretados por un solo observador que desconocía el
grupo de proveniencia del individuo estudiado.
Estructura ventricular izquierda
Se midieron los diámetros sistólicos (DS) y diastólicos (DD) del
eje corto del ventrículo izquierdo así como los espesores del septum
interventricular (S) y la pared posterior (PP) a fin de diástole
(vértice de la onda R en el ECG). La relación radio/espesor (R/E)
fue obtenida con el cociente entre DD/2 y PP.
La masa ventricular izquierda fue calculada a fin de diástole según
Devereux y col12. La masa ventricular fue dividida por la superficie
corporal para calcular el índice de masa ventricular izquierda
(IMVI). Con imágenes obtenidas por eco bidimensional a nivel de los
músculos papilares en el eje corto del ventrículo izquierdo se
midió de endocardio a endocardio la dimensión del mismo (EC) y con
cortes en cuatro cámaras desde ápex se cuantificó la longitud del
eje largo (EL), desde el endocardio apical hasta un punto medio del
plano valvular mitral. La relación entre esos ejes (Ec/El) fue
utilizada para describir cuantitativamente la forma del ventrículo
izquierdo.
Función ventricular izquierda
El cociente de la diferencia entre Dd y Ds y el Dd multiplicado por
100 (Dd-Ds/Dd .100) permitió calcular el porcentaje de acortamiento
circunferencial del ventrículo izquierdo (% Acort.). Los volúmenes
ventriculares de fin de diástole y fin de sístole, el volumen latido
y la fracción de eyección del ventrículo izquierdo fueron estimadas
por los Dd y Ds utilizando la fórmula de Teichholz13.
El volumen minuto se lo obtuvo multiplicando el volumen latido
referido por la frecuencia cardíaca en el momento del estudio. La
división del volumen minuto por la superficie corporal permitió
obtener los valores del índice cardíaco (IC). La resistencia
periférica total (RPT) se calculó a partir del cociente entre la
presión arterial media (PAM) y el IC (PAM)/IC14.
La función diastólica fue analizada utilizando las señales
obtenidas con el eco-Doppler pulsado. Se registraron imágenes del
flujo mitral ubicando el tomador de muestra en el lado ventricular del
anillo mitral en cuatro cámaras desde ápex15. En los trazados así
obtenidos se midieron: 1) velocidad pico de lleno temprano (E); 2)
Velocidad pico de lleno tardío (A); 3) relación E/A; 4) aceleración
media del lleno temprano (Acel. E); 5) desaceleración media del lleno
temprano (Desacel. E); 6) área de la onda de lleno temprano (Area E);
7) área de la onda de lleno tardío (Area A); 8) relación entre esas
áreas (Area E/Area A)11; 9) velocidad pico de lleno (VPLL)16; 10)
fracción de lleno temprano, a través del cociente entre el Area E y
el área total (Area E + Area A) multiplicado por 100.
Colocando el tomador de muestra de flujo en una posición intermedia
entre el tracto de salida del ventrículo izquierdo y la válvula
mitral se obtuvieron simultáneamente los flujos de entrada y salida
del ventrículo izquierdo y se midió la duración del período
isovolúmico diastólico (DI)15.
Análisis de datos
El procesamiento de datos y los cálculos estadísticos se
realizaron a través del EPI INFO versión 6.0. Se utilizó el test de
«t» de Student para comparar las variables continuas. Utilizando el
GB-Stat para MS Windows versión 5.3 se efectuó un análisis de
covarianza para realizar ajustes por frecuencia cardíaca y/o índice
de masa corporal según los parámetros comparados. En todos los casos
el nivel de significación aceptado fue de p < 0.05. Los datos se
expresan como media ± ES.
Resultados
Características generales
En la tabla I se pueden observar los datos correspondientes a
diferentes parámetros analizados en cada grupo.
Los individuos con PAO mostraron una edad promedio similar a la de los
jóvenes con hipertensión arterial estadío I. El índice de masa
corporal fue aproximadamente 4% superior en este último grupo.
La RPT fue menor en los H, respecto a la encontrada en los PAO.
En los individuos del grupo PAO la FC fue más baja que en los H como
puede observarse en la Tabla 1.
Los valores medios de PAS y PAD encontrados en ambos grupos están
representados en la Figura 1. Si bien el JNC-V requiere valores de
presión arterial superiores a 140 mm Hg para los sistólicos y 90 mm
Hg para los diastólicos para definir el estadío I, los valores
medios de las cifras de presión no deben estar necesariamente en ese
rango. En cada caso particular los jóvenes estudiados tenían los
criterios correspondientes para ser incluidos en cada grupo.
Estructura ventricular izquierda
En la Tabla 2 se muestran los valores de los distintos parámetros
que permitieron caracterizar la estructura del ventrículo izquierdo.
Los diámetros sistólicos y diastólicos así como las dimensiones de
EC y EL y eC/EL fueron similares entre H y PAO.
Como puede analizarse en la Figura 2 los espesores del tabique
interventricular a fin de diástole (PAO: 8,7 ± 0,17 mm, H: 11,5 ±
0,4 mm -p < 0,01) y de la pared posterior en igual momento del
ciclo cardíaco (PAO: 7,9 ± 0,18 mm, H: 10 ± 0,13 mm -p < 0,01)
fueron mayores en H. Sólo un individuo de los 13 del grupo H superó
el espesor límite normal de 12 mm en una de las paredes.
El índice de masa ventricular (Fig. 3) resultó mayor en H (PAO: 89,6
± 3,33 g/m2, H:124,5 ± 6 g/m2-p < 0,01), sin superar el límite
normal máximo de 130 g/m2 diferencia que se mantuvo al ajustar por
índice de masa corporal en un análisis de covarianza (medias
ajustadas PAO: 89,7 g/m2 ± 3,33 g/m2; H: 124,4 g ± 6 g/m2 -p <
0,01). Solamente 3 de los 13 hipertensos (23%) tuvieron un índice de
masa por encima de ese límite. R/E resultó inferior en H, pero
manteniéndose dentro de los límites normales. Esta modificación del
espesor relativo sería un indicador de los cambios adaptativos que
pueden conducir al desarrollo de una hipertrofia concéntrica.
Función
Función sistólica
Como puede observarse en la figura 4 el volumen latido y el índice
cardíaco fueron superiores en H (Volumen latido: PO: 93,3 ± 4,8 ml,
H: 109 ± 5,6 ml, p < 0,05; índice cardíaco: PO: 3,3 ±
0,14l/minm2, H: 4,8 ± 0,36 l/min/m2, p< 0,01). Las diferencias en
el volumen latido siguieron siendo significativas al ajustar los
valores por frecuencia cardíaca (medias ajustadas PAO: 88,9 ± 4,8
ml, H: 113,7 ± 5,6 ml - p < 0,01) o por índice de masa corporal
(medias ajustadas PAO: 95,3 ± 4,8 ml, H: 107,2 ± 5,6 ml -p <
0,05). Estos hallazgos pueden ser interpretados como el resultado de
la hiperdinamia descripta en los estadios iniciales de la
hipertensión17, 18.
La valoración de la función sistólica a través de algunos índices
del período eyectivo como el porcentaje de acortamiento y la
fracción de eyección, no alcanzaron a demostrar diferencias
significativas entre los grupos como se analiza en la Tabla 3. El
volumen de fin de diástole del VI tampoco fue diferente en los dos
grupos (Tabla 3).
Función diastólica
La función diastólica del ventrículo izquierdo fue evaluada por
diferentes índices, como se muestra en la Tabla 4.
El comportamiento del Area E, Area A, Area E/Area A y FLLT se
encuentran representados en la figura 5. Area E/Area A resultó mayor
en los PAO (PAO 2,72 ± 0,11, H:1,85 ± 0,41 -p < 0,01). Area E no
mostró diferencias estadísticamente significativas entre los grupos
(PAO: 7,09 cm2 ± 1,8 m/s, H: 6,69 ± 0,96 n.s). Area A, expresión
del lleno tardío como resultado de la contracción auricular, fue
mayor en H (PAO: 2,64 ± 0,09 cm2, H: 3,78 ± 0,95 cm2 -p < 0,01)
indicando que la diferencia en Area E/Area A representaría una
modificación del lleno ventricular con desplazamiento del mismo hacia
la fase más tardía. FLLT mostró valores menores en H (PAO: 0,72 ±
0,06%), H: 0,64 ± 0,01% -p < 0,01) confirmando el desplazamiento
del lleno ventricular hacia la parte final de la diástole en H. La
influencia que la diferente frecuencia cardíaca entre PAO y H pudo
tener sobre los valores de estos índices fue estudiada por análisis
de covarianza. Al aplicar este método se observó cómo el ajuste de
las medias de A y E/A por la frecuencia cardíaca hizo desaparecer las
diferencias significativas encontradas. (A (medias ajustadas por
frecuencia cardíaca) PAO: 0,50 ± 0,01 m/s, H: 0,55 ± 0,01 m/s -p =
0,14, E/A (medias ajustadas) PAO: 1,66 ± 0,01, H: 1,49 ± 0,01 -p =
0.09).
Las medias ajustadas por frecuencia cardíaca de Area E (PAO: 7,1 ±
1,8 cm2, H: 6,6 ± 0,96 cm2 -n.s.), Area A (PAO: 2,9 ± 0,09 cm2, H:
3,5 ± 0,95 cm2 -p < 0,01) y FLLT (PAO: 0,71 ± 0,06%, H: 0,65 ±
0,01% -p < 0,02) siguieron mostrando igual comportamiento
independientemente de la frecuencia cardíaca.
Discusión
No es frecuente encontrar individuos en los períodos iniciales de
la hipertensión arterial para poder ensayar diseños metodológicos
correctos a los efectos de estudiar la presencia de alteraciones
cardíacas en esos estadíos, tal como ocurrió en nuestras
observaciones. Precisamente el estudio de una población de
hipertensos con 21 años de edad promedio nos ubicó en una situación
ideal para ese análisis. La selección de varones, tomada en base a
la mayor prevalencia de la hiperten-sión arterial (13%) comparada con
la encontrada en mujeres (3%) según estudios previos19, si bien puede
determinar una limitación para extender nuestras observaciones a la
población general, nos permite por otra parte reforzar las
conclusiones al configurar un grupo más homogéneo. Sin embargo, se
incluyeron en el estudio ecocardiográfico sólo aquellos que
consintieron en efectuárselo, lo cual podría inducir algún sesgo.
Las características estructurales del ventrículo izquierdo en los H
fueron distintas a las de la población control. Si bien el tamaño de
la cavidad y su configuración geométrica no se modificaron, fue
posible notar un aumento en el espesor de las paredes, y en el índice
de masa ventricular. Este aumento de la masa ventricular ha sido
considerado generalmente como un mecanismo de adaptación secundario
al incremento de la presión20-22. Sin embargo, algunos autores
señalan a esa hipertrofia como responsable de la iniciación de la
hipertensión23. Si bien diversos estudios epide-miológicos han
demostrado el valor de la hipertrofia ventricular como un
significativo factor independiente de riesgo cardiovascular1-4,
creemos que no existe aún consenso claro para definir el umbral de
masa que determine la existencia de hipertrofia. La elección de un
valor de corte para tal fin, puede parecer arbitrario si consideramos
que la masa ventricular se comporta como una variable continua.
Algunos estudios han seleccionado el valor límite de acuerdo a bases
estadísticas a partir de observaciones en poblaciones normales24, 25.
De todas formas, creemos que el diseño metodológico ideal que nos
hubiera permitido obtener ese valor de corte en nuestro grupo,
tendría que haber determinado la masa ventricular en una población
de 1000 a 2000 estudiantes varones de medicina de 21 años de edad,
para seleccionar en base a la distribución, el valor por encima del
cual se encuentre el 5% de los jóvenes estudiados. En nuestras
observaciones, si bien la masa ventricular es mayor en H, solamente 3
de los 13 jóvenes pueden ser definidos como portadores de
ventrículos hipertró-ficos, en base al criterio de Levy y col4,
mostrando por lo tanto una prevalencia de hipertrofia ventricular
izquierda del 23%. Levy y col4 señalan un riesgo de morbilidad
cardiovascular casi tres veces mayor cuando la masa ventricular es de
125 g/m2 en relación a valores de 75 g/m2. Esto puede indicar por lo
tanto que si bien la prevalencia de hipertrofia en nuestra población
de hipertensos no es elevada, el riesgo de presentar eventos
cardiovasculares puede ser potencialmente mayor en relación a los
individuos con presión arterial óptima, cuya masa ventricular era
significativamente menor.
En coincidencia con lo señalado por algunos autores14, 17, 18, los H
mostraron un aumento del índice cardíaco y de la frecuencia
cardíaca definiendo la presencia de un estado hiperdinámico,
encontrado durante la fase inicial de la enfermedad14. El aumento del
índice cardíaco, ausente por otra parte en otras observaciones sobre
individuos de similar edad8, estuvo determinado por un incremento
tanto de la frecuencia cardíaca como del volumen latido. Andersson y
col26 refieren en varones jóvenes (18 a 22 años) valores similares
de índice cardíaco a los señalados por nosotros tanto en el grupo
control como en el grupo de hipertensos con hiperdinamia.
A pesar del aumento del índice cardíaco, los parámetros utilizados
para evaluar la función sistólica del ventrículo izquierdo, como la
fracción de eyección y el porcentaje de acortamiento no mostraron
cambios significativos en los H, como ha sido descripto por otros
autores8.
La resistencia periférica mostró valores inferiores en los H, como
ha sido señalado en las fases iniciales de la hipertensión
arterial14. Esa disminución de la resistencia periférica puede
responder al aumento del volumen minuto, aunque en magnitud no
suficiente como para normalizar los valores de presión arterial. Si
analizamos la experiencia de Guyton y col27 donde se estudiaron las
variaciones de volumen minuto, presión arterial y resistencia
periférica en animales sometidos a una sobrecarga de volumen, podemos
observar cierta coincidencia con nuestros resultados en relación a la
reducción de la resistencia periférica por aumento del volumen
minuto.
La reducción del lleno inicial del ventrículo izquierdo ha sido
definida como una manifestación temprana de alteración de la
función diastólica en la hipertensión arterial6, 7, 28. Varios
factores estructurales (hipertrofia ventricular) y funcionales
(frecuencia cardíaca, función sistólica, condiciones de carga,
estimulación simpática, flujo coronario y perfusión miocárdica)
han sido considerados como responsables de esa alteración29. Fouad y
col30 encontraron una correlación negativa y significativa entre la
masa ventricular y la máxima velocidad de lleno del ventrículo
izquierdo (+dV/dt). Por otra parte Bonaduce et al31 informaron una
correlación similar entre masa ventricular y velocidad pico de lleno
normalizada. Sin embargo, otros autores no pudieron repetir esas
observaciones considerando que las alteraciones en el lleno
ventricular pueden ocurrir precozmente antes del desarrollo de
hipertrofia y más aún del compromiso de la función sistólica32. En
oposición a lo anterior, en hipertrofias fisiológicas detectadas en
levantadores de pesas no se han podido encontrar alteraciones en el
lleno ventricular33.
Al analizar las características del lleno ventricular debemos tener
en cuenta el rol que tiene la frecuencia cardíaca en modificar los
valores de los diferentes índices utilizados independientemente de la
presencia o no de cambios de la misma34. Esta influencia de la
frecuencia en nuestras observaciones fue de importancia en los
índices basados en mediciones de velocidades, haciendo desaparecer
las diferencias significativas al ajustar los valores medios por los
de esa frecuencia. Sin embargo, cuando se consideraron índices que
analizaron las áreas de la señal de flujo mitral, las diferencias
significativas siguieron observándose en forma independiente de las
variaciones de frecuencia. Estas diferencias nos permiten confirmar
nuestras conclusiones sobre la modificación que experimenta el lleno
ventri-cular aún en etapas muy tempranas de la hipertensión
arterial.
Conclusión
En un grupo de jóvenes varones de 21 años de edad, con
hipertensión arterial estadio I del JNC V se detecta: 1) aumento del
índice de masa ventricular izquierda 2) aumento del índice cardíaco
y disminución de la resistencia periférica y 3) alteraciones del
lleno ventricular izquierdo que aparece desplazado hacia una fase más
tardía.
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Fig. 1.— En el presente gráfico de barras se representan los
valores medios, con sus errores standard respectivos, de la presión
arterial sistólica y diastólica de ambos grupos.
Fig. 2.— Se pueden observar los espesores del septum
interventricular y de la pared posterior del ventrículo izquierdo en
los grupos estudiados. Las barras blancas representan los valores
medios con sus ES del grupo con presión óptima (PAo), mientras que
las barras negras los valores correspondientes al grupo de hipertensos
(H). Los puntos blancos y los negros son los valores individuales
obtenidos en cada grupo. La línea horizontal trazada a partir de los
12 mm señala el valor máximo normal de ambos espesores. Si bien los
hipertensos muestran mayor espesor parietal, los valores promedio
están dentro de límites normales, encontrando sólo un individuo con
espesor del septum superior a los 12 mm.
Fig. 3.— Gráfico que muestra en barras (blancas: PAO, negras: H)
los valores medios con sus ES del índice de masa ventricular
izquierda (IMVI) y en puntos (blancos: PO, negros:H) los datos
individuales del mismo parámetro. La línea trazada a partir de los
130 g/m2 señala el límite superior normal. Se puede observar un
mayor valor medio del IMVI en el grupo H aunque sin sobrepasar los 130
g/m2. Al analizar los datos individuales se detecta que solamente tres
individuos de este grupo tienen hipertrofia.
Fig. 4.— Las barras blancas representan los valores medios y sus
ES del volumen latido y el índice cardíaco del grupo con PAO. Las
barras negras los correspondientes al grupo H. Ambos parámetros
están significativamente aumentados en los H.
Fig. 5.— En la parte superior de la figura se observan a la
izquierda los valores del área de onda E (Area E) y a la derecha los
de la onda A (Area A) en PAO (barra blanca), y H (barra negra). En la
parte inferior sobre el lado izquierdo se representa de igual forma la
relación entre las áreas E y A (Area E/Area A) y sobre el lado
derecho la fracción de lleno temprano (FLLT). Las diferencias
encontradas en Area A, Area E/Area A y FLLT señalan un cambio en el
llenado ventricular hacia la fase más tardía de la diástole en H.
TABLA 2.— Parámetros utilizados para analizar la estructura
ventricular izquierda
Control Hipertensos P
n = 21 n =13
DD (mm) 49,90 ± 0,72 51,76 ± 0,85 NS
DS (mm) 31,76 ± 0,53 31,92 ± 1 NS
EL (mm) 92,47 ± 1,53 93,15 ± 2,45 NS
EC (mm) 49,81 ± 0,83 51,54 ± 1,27 NS
R/E 3,21 ± 0,09 2,72 ± 0,05 < 0,001
EC/EL 0,54 ± 0,01 0,55 ± 0,01 NS
TABLA 1.— Características de los grupos
Control Hipertensos P
n = 21 n = 13
Edad (años) 20,23 ± 0,18 20,85 ± 0,66 NS
IMC (kg/m2) 22,57 ± 0,38 24,26 ± 0,84 < 0,04
PAM (mmHg) 95,66 ± 2,23 112,17 ± 3,13 < 0,001
FC (lat/min) 69,60 ± 1,53 80,52 ± 3,58 < 0,003
RPT 0,017 ± 0,0008 0,013 ± 0,001 < 0,008
(mmHg.L-1.
min.m2)
TABLA 3.— Parámetros utilizados en la valoración de la función
sistólica del ventrículo izquierdo
Control Hipertensos P
n = 21 n = 13
% Acort. 36,20 ± 0,98 38,05 ± 1,20 NS
FE 0,73 ± 0,01 0,76 ± 0,01 NS
VDF (ml) 126 ± 5,7 144 ± 8,3 NS
TABLA 4.— Indices de evaluación de la función diastólica del
ventrículo izquierdo
Control Hipertensos P
n = 21 n = 13
Acel. E (m/s2) 16,9 ± 2,7 17,52 ± 4,70 NS
Desacel. E (m/s2) 6,19 ± 0,25 4,95 ± 1,91 NS
E(m/s) 0,76 ± 0,02 0,76 ± 0,03 NS
A (cm/s) 0,43 ± 0,01 0,61 ± 0,01 < 0,01
VPLL (m/s-1) 8,05 ± 0,22 7,71 ± 0,64 NS
E/Area A 1,77 ± 0,01 1,38 ± 0,01 < 0,01
DI (ms) 84,76 ± 4,6 77,3 ± 12,18 NS
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