|
|
VENTILACION MECANICA NO INVASIVA EN PACIENTE HIV.+
VENTILACION MECANICA NO INVASIVA COMO TRATAMIENTO DE LA NEUMONIA
SEVERA EN UN PACIENTE CON SEROLOGIA HIV POSITIVA
EDGARDO M. SOBRINO,
GUILLERMO C. MONTIEL, SILVIA A. QUADRELLI,
DANIELA FISHMAN; AQUILES J. RONCORONI
Instituto de
Investigaciones Médicas Alfredo Lanari, Facultad de Medicina,
Universidad de Buenos Aires
Key words: HIV, pneumonia, non-invasive ventilation
Resumen
Paciente
de 27 años, HIV+ que ingresa en insuficiencia respiratoria por
probable neumonía por Pneu- mocystis carinii (NPC). Presentaba disnea
severa, uso de músculos accesorios y frecuencia respiratoria 44 por
minuto. El a/AO2 era 0.35. Se aplicó BiPAP durante 12 horas. Al
retirarla el a/AO2 era O.42, con alivio de la disnea, disminución de
la frecuencia respiratoria (25 por min) y sin uso de músculos
accesorios. No se observaron complicaciones. Al momento del alta el
a/AO2 era 0.68. La aplicación de CPAP ha sido comunicada en pacientes
con PCP, pero no la BiPAP. Nuestro paciente mostró claras evidencias
de mejoría sugiriendo que la BiPAP en PCP es una alternativa útil
que debería ser incorporada al manejo de estos pacientes.
Abstract
Non-invasive
mechanical ventilation as treatment for severe pneumonia in an HIV
positive pa- tient. A 27 year-old HIV+ patient was admitted to the
hospital for probable Pneumocystis carinii pneumonia (PCP). He was
severely dyspneic, with respiratory rate of 44 x min and accessory
respiratory muscle contraction. The alveolar-arterial quotient was
0.35. Ventilation by BiPAP was applied during 12 hours. After BiPAP
a/AO2 was O.42, with amelioration of dyspnea, decrease of respiratory
rate (25 x min) and without using of accessory respiratory muscles. No
complications occurred. At the end of hospital stay a/AO2 was 0.68.
CPAP application but not BiPAP has been reported in PCP. Our patient
showed evident improvement after BiPAP, suggesting that this method of
ventilation is useful and should be incorporated to the routine
management of these patients.
Dirección postal: Dr. Edgardo Sobrino, Instituto de
Investigaciones Médicas Alfredo Lanari, Combatientes de Malvinas
3150, 1427 Buenos Aires, Argentina. Fax: 54-1-522-3370
Recibido: 6-I-1998 Aceptado: 15-IV-1998
Las complicaciones pulmonares de la infección por HIV están
asociadas a importante morbilidad y mortalidad. La insuficiencia
respiratoria aguda requiere en no pocos casos la asistencia
respiratoria mecánica (ARM). En los últimos años la aplicación de
técnicas no invasivas de ventilación mecánica ha sido utilizada en
distintas etiologías de fallo respiratorio agudo y crónico. El
presente caso ilustra acerca de la aplicación exitosa de ARM no
invasiva mediante presión positiva intermitente bi-nivelada (BiPAP)
en un paciente con neumonía grave asociada a infección por HIV.
Caso clínico
Paciente de 27 años que consulta por disnea severa de una semana
de evolución. Presentaba antecedentes de alcoholismo y tabaquismo
(20-30 cig/d). Negaba conductas de riesgo para infección por HIV. El
examen físico de ingreso mostró taquicardia (130 por minuto) y
taquipnea (44 por minuto) con utilización de músculos accesorios,
sin otros hallazgos significativos. La RxTx mostró infiltrados
pulmonares bilaterales y simétricos de tipo intersticial distribuidos
de base a vértice, con un patrón fino y reticular sin nódulos ni
cavitaciones. No se observaban adenomegalias ni derrame pleural. Los
gases en sangre respirando aire ambiente fueron PaO2 40 mmHg. PaCO2
28.7 mmHg., pH 7.50, bicarbonato 22 mEq/L a/AO2 0.35, PA/FIO2 190. El
resto del laboratorio mostró Hto. 38%, GB 6.100/mm3, VSG 135 mm,
albúmina 2.7 g/L y LDH 777 UI/L. Se constata serología positiva para
HIV. El recuento de CD4 fue 156/mm3. Un análisis de esputo dio
resultados bacteriológicos negativos (incluyendo Pneumocystis
carinii). Se realizó diagnóstico presuntivo de neumonía por
Pneumocystis carinii (PCP) iniciándose tratamiento con
trimetoprima-sulfametoxazol (20 mg/kg de TMS y 100 mg/kg de SMX) sin
realización de procedimientos diagnósticos invasivos. Se inició
administración de corticoides (hidrocortisona 300 mg/d por vía iv).
El paciente evidenció rápida peoría pese a la administración de
oxígeno por cánula con aumento de la frecuencia respiratoria, disnea
severa, incremento del uso de músculos accesorios, sudoración
profusa y ansiedad a las dos horas del ingreso. Se decidió la
aplicación de ventilación no invasiva con BiPAP por 12 hs. Se
inició tratamiento con IPAP 16 cm H2O y EPAP 4 cm H2O. Al finalizar
la primera hora de ARM no invasiva el paciente permanecía con la
misma frecuencia respiratoria pero sin utilización de músculos
accesorios. La frecuencia cardíaca era 110 por minuto y la TA 110/60
mmHg. Los gases en sangre fueron PaO2 59 mmHg, PaCO2 29.4 mmHg pH
7.49, bicarbonato 22.4 mEq/L, a/AO2 0.43, PA/FIO2 245. Se incrementó
la IPAP a 20 cm H2O y la EPAP a 8 cm H2O con buena tolerancia. El
paciente presentó clara mejoría del patrón respiratorio con
disminución de la frecuencia respiratoria y cardíaca. A la tercer
hora de ARM no invasiva la FR fue 25 por min, la frecuencia cardíca
98 por min, la TA110/60 mmHg. Los gases (FIO2 0.21) mostraron PO2 59
mmHg, PCO2 31.2 mmHg, pH 7.48, bicarbonato 22.7 mEq/L, a/AO2 0.47,
PA/FIO2 281. A las 12 horas de iniciada la ARM no invasiva los gses
con FIO2 1 mostraron PaO2 268 mmHg PaCO2 30 mmHg pH 7.48 bicarbonato
21.3 mEq/L a/AO2 O.42, PA/FIO2 268, con clara mejoría subjetiva. La
frecuencia respiratoria era 25 por min, la frecuencia cardíaca 90 por
min y la TA 110/60 mmHg. Ante la estabilidad clínica y de laboratorio
se suspendió la aplicación de BiPAP. A las 12 hs sin ARM la
frecuencia respiratoria era 26, la frecuencia cardíaca 78 y la
TA110/60 mmHg. No había uso de músculos accesorios. Los gases en
sangre mostraron Pa02 42.6 mmHg, PaCO2 28.5 mmHg, pH 7.50, bicarbonato
22.6 mEq/L, a/AO2 0.36, PA/FIO2 202 (Tabla 1). Durante la aplicación
de ARM no se observaron complicaciones. El paciente permaneció en UTI
por tres días y luego 18 días en una sala de internación general
recibiendo oxigenoterapia por cánula nasal durante los primeros diez
días.
Se administraron TMP/SMX y corticoides durante 28 días con buena
respuesta clínica pero con lenta resolución radiológica y del
intercambio gaseoso. La TAC de tórax al día séptimo mostró
velamiento difuso bilateral con patrón tipo vidrio esmerilado A1
momento del alta los gases en sangre eran: PaO2 77.8 mmHg, PCO2 31.8
mmHg pH 7.42 bicarbonato 20.0 mEq/L, EB-3 a/AO2 0.68, PA/FIO2 370.
Se administraron TMP/SMX y corticoides durante 28 días con buena
respuesta clínica pero con lenta resolución radiológica y del
intercambio gaseoso.La TAC de tórax al día séptimo mostró
velamiento difuso bilateral con patrón tipo vidrio esmerilado A1
momento del alta los gases en sangre eran: PaO2 77.8 mmHg, PCO2 31.8
mmHg pH 7.42 bicarbonato 20.0 mEq/L, EB-3 a/AO2 0.68, PA/FIo2 370.
Discusión
Las complicaciones pulmonares del síndrome de inmunodeficiencia
adquirida son las más frecuentes desde el inicio de la epidemia y
siguen siendo la principal causa de muerte. Con diferencias
epidemiológicas regionales la neumonía por Pneumocystis carinii
(PCP) es todavía la complicación pulmonar más habitual después de
las neumonías bacterianas, especialmente en el grupo de pacientes con
recuento de CD4 menor de 200/mm3 en los últimos dos meses1. Alrededor
de 5% de los pacientes HIV+ requieren internación en terapia
intensiva (UCI). El desarrollo de insuficiencia respiratoria aguda es
la principal causa de ingreso a una UCI y representa más del 50% de
las admisiones2. Alrededor de 60% de las mismas son secundarias a PCP
y más del 70% requerirán ventilación mecánica2. Si bien al inicio
de la epidemia fue comunicada una alta mortalidad para este subgrupo
de pacientes (88-100%), a partir de 1989 se observó una marcada
disminución de los casos fatales (64% de sobrevida en el primer
episodio de neumonía, 25% en el segundo episodio)3. Las causas más
probables de esta mejor evolución están relacionadas con el uso de
corticoides en forma precoz3, el tratamiento antirretroviral, el
diagnóstico temprano y, quizás, el mayor conocimiento de la
enfermedad. Esta mejor perspectiva pronóstica justifica la inversión
de recurso humano y técnico para superar el episodio agudo teniendo
en cuenta las mayores posibilidades de sobrevida prolongada.
Es importante señalar que pese a esta mejor expectativa de
recuperación, la mortalidad del grupo de pacientes que ingresa a ARM
sigue siendo significativa-mente alta (o aún superior a la previa)
pese a todo el tratamiento de soporte4. Esto enfatiza la necesidad de
implementar tratamientos precoces que retrasen o eviten la
ventilación mecánica.
La presentación clínica de este paciente fue altamente sugestiva de
PCP. La historia mostraba evolución subaguda y el examen físico era
normal. El recuento de CD4 menor de 200/mm3 y la LDH elevada (presente
en 95% de los pacientes con PCP) eran consistentes con el
diagnóstico5. La radiología convencional, si bien inespecífica,
correspondía al patrón más típico de PCP con infiltrado nodulillar
difuso bilateral. La TAC de tórax aportó datos muy típicos de este
tipo de neumonía con intenso patrón de vidrio esmerilado de base a
vértices. El examen de esputo negativo es de utilidad limitada ya que
hasta 50% de los pacientes no tienen PC en la muestra y el impacto de
un estudio negativo sobre la probabilidad de PCP es enteramente
dependiente de la sensibilidad de la prueba en la institución de
referencia, habiéndose comunicado tasas de sensibilidad tan variables
como el 13 al 72%. Aunque ningún método no invasivo permite el
diagnóstico de certeza de PCP, hay cierto nivel de acuerdo en que la
broncoscopia puede reservarse para aquellos casos en que la dificultad
diagnóstica sea elevada y la posibilidad de riesgos muy baja. Ha sido
señalado que la realización de la misma no modifica la sobrevida y
está asociada a incremento de la morbilidad y de los costos6. La
marcada inestabilidad respiratoria de este paciente hubiera obligado a
la intubación y asistencia respiratoria mecánica para realizar la
broncoscopia, lo cual no parecía justificarse inicialmente para un
primer episodio de neumonía con datos de prevalencia estadística y
de presentación clínico-radiológica a favor de PCP.
Este paciente presentaba hipoxemia severa como criterio de mal
pronóstico en el corto plazo. Ha sido señalado5 que la LDH
aumentada, la leucocitosis y la PaO2 y PaCO2 disminuidas son criterios
de mal pronóstico en el corto plazo. La taquipnea (> 40 x min) y
el uso de músculos accesorios asociados al marcado deterioro de los
gases en sangre indicaban elevadas posibilidades de requerimiento más
o menos inmediato de ARM. En este contexto las opciones posibles eran:
a) tratamiento farmacológico y conducta expectante; b) intubación y
ARM convencional, c) ARM no invasiva.
La ventilación no invasiva es un medio seguro y efectivo de soporte
ventilatorio en pacientes con insuficiencia respiratoria aguda (IRA)7
, 8. Si bien los resultados en enfermedad pulmonar obstructiva
crónica hipercápnica son muy alentadores con una tasa de éxito
superior al 60%, la experiencia en pacientes con insuficiencia
respiratoria aguda no hipercápnica es más escasa9. Wysocki y col10
comunicaron una menor tasa de éxito en pacientes con fallo
respiratorio no hipercápnico, pero la mayor parte de los reportes de
la literatura muestran resultados favorables en pacientes con IRA
hipoxémica9. Los hallazgos no uniformes, pueden ser secundarios a la
diversidad de patologías asociadas a la insuficiencia respiratoria
hipoxémica, algunas de las cuales pueden mejorar simplemente con
balance negativo (como en el caso de la insuficiencia cardíaca)
mientras que otras suelen casi inevitablemente requerir ARM
convencional (la mayor parte de los casos de trastorno respiratorio
agudo del adulto).
En un paciente como el actual las dos opciones posibles de ARM no
invasiva eran la aplicación de CPAP o la de presión positiva
intermitente (IPPV) con dos niveles de presión. En la disminución de
distensibilidad pulmonar (como podría presumirse en este caso), el
aumento del trabajo respiratorio está asociado a la presencia de una
mayor carga elástica. La alteración en la curva presión volumen
(P/V) aumenta el trabajo respiratorio al requerir una mayor presión
para lograr igual o aún menor volumen. Asociado a esto, la
disminución de la capacidad residual funcional (CRF) con disminución
del volumen corriente (Vt) y aumento de la frecuencia respiratoria
(FR) como compensación, aumentan aún más el trabajo respiratorio.
La CPAP (o la PEEP) actúan aumentando la CRF y por tanto desplazando
la curva P/V hacia la izquierda con lo cual se obtiene disminución
del trabajo inspiratorio y mayor reclutamiento alveolar7. Al evitar el
colapso espiratorio las áreas de shunt son transformadas en áreas de
V/Q > O con la consiguiente mejoría en el intercambio gaseoso.
La presión positiva continua ha sido utilizada en pacientes con NPC.
Prevedors y col.11 utilizaron CPAP en todos aquellos pacientes con PCP
que desarrollaran PaO2 menor de 50 mmHg o SaO2 < 90% con una
mortalidad hospitalaria de 22%. Sólo 2 pacientes requirieron ser
intubados y ventilados en forma convencional y ambos murieron. Con
similares resultados el grupo del Hospital Bichat-Claude Bernard de
París reportó 25 pacientes tratados con aplicación de CPAP con
buena evolución en 23 de ellos12. En el único estudio prospectivo de
ARM no invasiva en HIV+ Boix y col.13 demostraron después de 60
minutos de CPAP, mejoría significativa en la FR, la frecuencia
cardíaca, el esfuerzo muscular, la PaO2, la SaO2 /FIO2 en los 11
pacientes que sobrevivieron; contrariamente a los resultados en 4
pacientes que no mostraron mejoría y debieron ser intubados y
ventilados con una tasa de mortalidad del 100%.
La desventaja relativa de la CPAP (comparada con la IPPV bi-nivelada)
es que, si bien disminuye el trabajo inspiratorio, no asiste la
inspiración con lo cual el esfuerzo inspiratorio queda a cargo del
paciente y el trabajo espiratorio se incrementa. Por otra parte son
difícilmente toleradas o aconsejables presiones superiores a 10 cm
H2O. En cambio la IPPV bi-nivelada no difiere esencialmente de una ARM
convencional con modo de presión de soporte. Disminuye francamente el
esfuerzo del paciente ya que asiste la inspiración y permite alcanzar
presiones de por lo menos 20 cm H2O7.
Meduri y col.14 trataron 11 pacientes HIV+ mediante presión de
soporte con aplicación de CPAP, 73% de los cuales mostraron mejoría.
No conocemos que el uso de IPPV bi-nivelada haya sido comunicado en
pacientes con PCP. Este método es una alternativa fisiológicamente
muy similar a la presión de soporte pero con un requerimiento
tecnológico de mucho menor costo. Nuestro paciente mostró claras
evidencias de mejoría con alivio de la disnea, disminución de la
frecuencia cardíaca y respiratoria y abolición del uso de músculo
accesorios. El paciente pudo ser mantenido simplemente con aporte de
O2 suplementario alcanzado adecuada SaO2 (94%) y no requirió soporte
ventilatorio posterior, siendo dado de alta dos semanas después sin
hipoxemia.
La prevalencia de pacientes seropositivos y sus consiguientes
complicaciones pulmonares sigue aumentando lenta pero consistentemente
en nuestro medio. El costo en salud de estos pacientes es
considerablemente alto y los recursos para asistirlos cada vez más
escasos y retaceados por la nueva organización economicista de la
salud. Las instituciones con mayor prevalencia de población
seropositiva están realizando enormes esfuerzos en el control de
costos derivados del cuidado intensivo de estos pacientes, habiendo
conseguido disminuir al mismo tiempo la mortalidad hospitalaria y los
costos hospitalarios de los sobrevivientes. La aplicación de IPPV
bi-nivelada a pacientes con PCP es una alternativa de mayor confort,
menor riesgo y menor costo que debiera ser rápidamente incorporada al
manejo de los pacientes con PCP y falla respiratoria aguda. La
realización en neustro medio de estudios prospectivos en estos
pacients es altamente deseable para determinar el impacto real de esta
modalidad de tratamiento sobre la sobrevida, las complicaciones
posteriores y los costos hospitalarios.
Agradecimientos: Los autores agradecen al Dr. Guillermo
Semeniuk sus valiosos comentarios y sugerencias y a Paola Gambina su
asistencia en la preparación de este texto.
Bibliografía
1. Masur H, Ognibene FP, Yarchoan R, Shelhamer JH, Baird B, Travis
W, et al. CD4 counts as predictor of opportunistic pneumonia in human
immunodeficiency virus (HIV) infectin. Ann Int Med 1989; 111: 223.
2. De Paolo VA, Millstein BH, Mayo PH, Salzman SH. Outcome of
intensive care in patients whit HIV infection. Chest 1995; 107:
506-10.
3. Montaner JS, Russel JA, Lawson L, Ruedy J. Acute Respiratory
failure secondary to Pneumocystis carinii pneumonia in the acquired
immunodeficiency syndrome: a potential rol for systemic
corticosteroids. Chest 1989; 95: 881-4.
4. Hawley PH, Ronco JJ, Guillemi SA, et al. Decreasing frequency but
worsening mortality of acute respiratory failure secondary to
AIDS-related Pneumocystis carinii pneumonia. Chest 1994; 106: 1456-9.
5. Garay SM. Greene J. Prognostic indicators in the initial
presentation of Pneumocystis carinii pneumonia Chest 1989; 95: 769-72.
6. Tu JV, Biem JH, Detsky SA. Bronchoscopy versus empirical therapy in
HIV infected patients with presumptive Pneumocystis carinii pneumonia.
Am Rev Respir Dis 1993; 148: 370-7.
7. Montiel GC, Quadrelli SA, Roncoroni AJ, Rodenstein D. Ventilación
mecánica no invasiva en terapia intensiva. Medicina (Buenos Aires)
1996; 56: 85-96.
8. Abou-Shala N, Meduri UG. Noninvasive mechanical ventilation in
patients with acute respiratory failure. Crit Care Med 1996; 24:
705-15.
9. Meyer TJ, Hill S. Non invasive positive pressure ventilation to
treat respiratory failure. Ann Int Med 1994; 120: 760-70.
10. Wysocki M, Tric L, Wolff MA et al. Non invasive pressure support
ventilation in patient with acute respiratory failure. Chest 1993;
103: 907-13.
11. Prevedors HP, Lee RP, Marriot D. CPAP: effective respiratory
support in patients with AIDS-related Pneumocystis carinii pneumonia.
Anaesth Intensive Care 1991; 199: 561-6.
12. Gachot B, Clair B, Wolff M, Reginert B, Vachon F. Continuous
positive airway pressure by face mask or mechanical ventilation in
patients with hujman virus infection and severe Pneumocystis carinii
pneumonia. Intens Care Med 1992; 18: 155-9.
13. Boix JH, Miguel V, Aznar O, et al. Presión positiva continua de
la vía aérea en la insuficiencia respiratoria aguda debida a
neumonía por Pneumocystis carinii. Rev Clin Esp 1995; 195: 69-73.
14. Meduri GU, Turner RE, Abou-Shala N, et al. Non-invasive positive
pressure ventilation via face mask. Chest 1996; 109: 179-93.
TABLA 1
Horas Frecuencia Frecuencia a/AO2 PA/FIO2
cardíaca respiratoria
(x min) (x min)
0 130 44 0.35 190.4
1 113 40 0.43 280.9
2 90 25 0.47 280.9
12 78 26 0.42 268
Fig. 1.– Evolución de la PA/FIO2 y a/AO2 durante la aplicación
de BiPAP. Se observa mejoría inicial que se mantiene durnate todo el
período deempleo de la presión positiva.
|
|
|
|
|