Actualizado 1 de junio, 2020
El nuevo esquema de vacunación anti-polio anunciado por el Ministerio de Salud pasa de la vacuna oral bivalente (bOPV) más conocida como Sabin, a la vacuna inactivada (IPV) también conocida como Salk y constará de 3 dosis a los 2, 4 y 6 meses de edad y un refuerzo en el ingreso escolar entre los 5 y 6 años.
Aquí la Dra. Mirta Roses, presidente de la Comisión Nacional de Inmunizaciones, Ministerio de Salud, hizo el anuncio, el 31 de mayo.
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“Agradezco el honor y la oportunidad de informar al público que, a partir del lunes 1ro de junio, o sea, a partir de mañana lunes, el país adoptará un nuevo esquema de vacunación contra la poliomielitis. Esto significa que, en todo el país, se dejará de usar la vacuna oral Sabin y se utilizará únicamente la vacuna inyectable tipo Salk.
La decisión ha sido publicada en la Resolución 814 del 24 abril de 2020 y surge de las recomendaciones emanadas de la Comisión Nacional de Inmunizaciones que presido, y del Comité Nacional de Certificación de la Erradicación de la Poliomielitis, presidido por el Dr. Pablo Bonvehí.
Como se detalla en los considerandos de la Resolución, en el año 2014 Argentina incorporó la vacuna inyectable completando el esquema con vacuna oral a la espera de mayores avances en la situación mundial tanto epidemiológica como de disponibilidad de la vacuna inyectable, y en el año 2016 se eliminó el virus tipo2 de la vacuna oral.
Bajo la conducción del Instituto Malbrán, en todo el país se destruyeron progresivamente todas las muestras de laboratorio que tuvieran virus polio2 o pudieran albergarlo.
La vacuna oral Sabin que permitió la erradicación de la polio de las Américas y acorralar su presencia en el mundo en solo dos países, es una vacuna de virus vivos atenuados y frente a determinadas condiciones, como las bajas coberturas de vacunación o las deficiencias inmunológicas de los niños, puede retomar su virulencia y causar parálisis.
La facilidad de su administración y su bajo costo, así como la capacidad de generar inmunidad intestinal y competir con el virus salvaje, han sido la clave del éxito de los esfuerzos de erradicación. El último caso de virus salvaje en la Argentina ocurrió en 1984.
Uno de los indicadores críticos de la certificación de la erradicación de la polio ha sido la vigilancia de la parálisis flácida. Gracias a la excelente capacidad del personal de salud en todo el país, de identificar y reportar las parálisis flácidas y enviar las muestras oportunamente al Instituto Malbrán, en la última década se han identificado 3 casos de parálisis relacionadas con el virus vacunal.
Recordemos que la región de las Américas fue la primera en el mundo en ser certificada libre de polio salvaje en 1994, ya que el último caso fue en Perú en 1991, esfuerzo conjunto liderado por la Organización Panamericana de la Salud con apoyo de UNICEF, Rotary, USAID y CIDA Canadá y el BID.
Por eso hoy sentimos una gran emoción al darle la despedida a las gotitas de Sabin que nos ayudaron a terminar con la polio y que usamos en operativos masivos en el país desde 1971.
Queremos agradecer a los miles de voluntarios y personal de salud que año tras año salieron por todos los rincones del país a encontrar a los niños para vacunarlos y para identificar las parálisis flácidas y tomar las muestras. La aplicación de la vacuna inyectable no será tan fácil como dar las gotitas, pero estamos seguros de que podrán seguir cumpliendo la tarea con el mismo entusiasmo y compromiso como hasta ahora.
Agradecemos a los técnicos y profesionales de laboratorio que por más de cuarenta años han sido parte de la Red Nacional de Laboratorios, parte esencial de la vigilancia, y su cabeza el Instituto Malbrán que además ha sido y seguirá siendo el referente para el Cono Sur y parte de la Red Mundial de Laboratorios de Polio hasta que veamos su desaparición global.
E invitamos a todo el pueblo argentino a celebrar un hecho histórico digno de destacar: que en medio de una pandemia y de una situación económica tan difícil, se decida dar el paso más necesario desde el punto de vista de la salud, más imperativo desde el punto de vista ético y más equitativo desde el punto de vista social.
Al gran pueblo argentino, salud!”
Mirta Roses
rosesperiago@hotmail.com