Jakob Folkema (1692-1767). Le Medecin du Village
Técnica: Grabado
Folkema fue un artista de los Países Bajos. Se destacó en la técnica del grabado, fue ilustrador de textos sagrados y de un libro de anatomía editado en 1737.
El grabado Le Medecin du Village muestra el atelier de un médico. En la parte inferior indica que se trata de Gaspar Weiss en su consulta de Berlín. Sin dudas se trata de un médico judío, los rasgos del doctor son acaso un estereotipo de la época con su nariz aguileña y la larga barba blanca, además el Dr. Weiss lleva una kipá. Examina con atención las características de la orina de uno de los pacientes que se encuentra al lado del hogar, tumbado en posición doliente, mientras una asistente cercana al médico todavía tiene el recipiente en el que se depositó la muestra. En el piso, desparramadas, se observan las hierbas y las hojas que el médico emplea en sus curaciones. Su escritorio muestra un desorden de objetos simbólicos. La calavera, los gruesos libros con sus cubiertas de cuero y el reloj de arena. Se indica a su vez que el grabado se produjo en el establecimiento de Casper Netcher, que funcionaba desde 1659 en Amsterdam, si bien no es esta la fecha en la que Folkema realizó la obra.
Este grabado nos lo envía el Dr. Gustavo Kusminsky quien dice: Le Medecin du Village acompañó la historia profesional de los médicos de mi familia. Acaso puede simbolizar el derrotero de un grupo familiar de emigrantes judíos que llegó a la Argentina a fines del siglo XIX y principios del XX. Un país donde prosperaron y pudieron asistir a la universidad. Fue mi abuelo, médico recibido en los años treinta en la Universidad de La Plata, quien se lo entregó a mi padre, recibido en la Universidad de Buenos Aires a fines de los cincuenta, y a su vez el grabado fue un regalo de mi padre a los pocos años de haber obtenido mi título de médico, a principios de los ochenta. Para seguir la tradición, este grabado deberá pasar a manos de mi sobrina, de nacionalidad holandesa, recibida de médica en la Universidad Libre de Amsterdam. Los trazos de los movimientos de la obra mostrarán entonces cómo una familia se ha movido de acuerdo a las circunstancias. Una parte de la historia familiar, luego de peregrinar durante siglos por distintas regiones de Europa, se asentó en Argentina durante el siglo XX, y ahora, otra rama en Amsterdam sigue con la profesión médica. El grabado de Folkema que retrata al Dr. Gaspar Weiss regresará a Amsterdam, su lugar de origen, en un futuro próximo. Le Medecin du Village, un médico judío retratado en su atelier de Berlín, obra realizada en los Países Bajos en el siglo XVIII, permite entrever un pasado itinerante también en la historia de ese médico que examina concienzudamente el frasco de orina, tan itinerante como el futuro incierto que depara el mañana.